Al hablar de yoga tendemos a pensar que es una práctica física o religiosa, pero realmente es un método de relajación que hoy en día se ha vuelto necesaria para aprender a controlar el estrés.
Es muy fácil ir al mercado, comprar lo que necesitamos, hacer vueltas y otras cosas más durante el día, pero nos parece complicado quedarnos quietos por solo unos segundos. Necesitamos movernos todo el tiempo.
Es así que esta disciplina milenaria nos enseña que al entrar en contacto con ese silencio interior a través de la meditación o de las posturas de yoga logramos sentir que la quietud es necesaria en la búsqueda de la calma.
Al hacer yoga, los niveles de adrenalina y estrés bajan y, por lo tanto, el corazón trabaja menos. Dejamos que el oxígeno se encargue de depurar esas toxinas de la sangre y que podamos llevar más sangre oxigenada hacia todo el organismo.
Lo anterior nos permite sentir que hay un mejor funcionamiento en nuestro cuerpo, reducción de la presión sanguínea, mejoría en la elasticidad de las arterias, regulación del ritmo cardiaco y aumento de la capacidad del manejo de la sangre al corazón.
Al practicar yoga regularmente, ayudamos a prevenir las enfermedades coronarias porque adquirimos consciencia de no dejarnos permear tan fácilmente por el estrés.
Entre las técnicas más adecuadas que encontramos para el corazón están los pranayamas o ejercicios de respiración que promueven una mejor circulación sanguínea y descanso del músculo cardiaco.
Para lograr este objetivo, las posturas ideales son Nadi Sodhana y Kapalabhati y las Asanas como: Salutaciones al Sol, Guerreros y Montaña, posturas con las que se logra una amplia apertura del pecho, lo cual ayuda a expandir el área del corazón, contribuyendo a un mejor funcionamiento del sistema circulatorio en general.
Los ejercicios de inclinación y alargamiento de la columna también ayudan a eliminar los bloqueos físicos en el corazón y pecho.
Y por último, con la meditación aprendemos a que la mente se apacigüe y se centre en dirigir su atención hacia pensamientos positivos, lo cual repercute positivamente en nuestra salud.