Víctor Alfonso Martín Jiménez. transportador de alimentos en Bogotá, pero oriundo de Gachetá, cundinamarca. nunca se imaginó que a sus 48 años le fuera a fallar el corazón.
El pasado 8 de marzo, mientras su esposa y sus dos hijos dormían, despertó un dolor en el pecho que nunca había sentido. Alarmado, fue a la clínica, en donde le diagnosticaron infarto de miocardio. Hoy hace parte de la Liga Colombiana Contra el Infarto y la Hipertensión, en donde inició su recuperación. Este es su testimonio:
¿Cuándo empezó a sentir síntomas?
Unos cuatro días antes, pero pensé que era gastritis porque sentía un ardor en el pecho y me quedaba sin aire. Me tomaba algo frío y me atacaba el dolor. El 8 de marzo, a las 12 de la noche, fue que me esperó un tremendo dolor en el pecho,.
¿Ese día fue normal para usted?¿Cómo transcurrió?
Fue un miércoles. Si, un día normal de la semana, trabaje tranquilo e inclusive hice un viaje a Zipaquirá.
¿Cómo describiría el dolor?
Era un ardor en el pecho constante que se fue ampliando hacia el brazo izquierdo. En ese momento , como el dolor era tan fuerte, me tomé una aspirina. Pero no me paso. También sudaba mucho, a veces frio y aveces calor.
Mi esposa me dijo que debiamos ir a la clinica por que no erra normal,
¿Qué ocurrió cuando llegó a la clínica?
Entré por urgencias y lo primero que recuerdo es que dijeron que venía muy mal. El caso es que me tomaron la tensión, me pusieron en una camilla y me hicieron un electrocardiograma-
¿Y cuando se enteró?
Hasta que llegó un doctor y explicó que había tenido un infarto. luego, en Cuidados Intensivos, me empezaron a tratar con medicinas, sueros y a cada rato me aplicaban una inyección en la barriga, que para anticoagulantes y prepararme para la cirugía. me iban a poner un stent (se inserta para ensanchar las arterias con el fin de mejorar la circulación en la sangre.)
¿y usted cómo estaba? Por que cualquier estaría nervioso y asustado
Mire que no, estaba bastante tranquilo porque pensé que era algo suave. No conocía la enfermedad ni había hablado nunca del tema. La verdad es que la ignorancia casi me mata pero también me ayudó ese día.
¿Cómo fue el procedimiento?
Cuando estaba en la camilla, algo pasó, creo que trato de darme otro infarto y me tuvieron que devolver.
Pasaron como dos días y el médico habló conmigo. Me explico todo lo que iba a hacer y me avisó que estaba en alto riesgo por que se trataba de una arteria coronaria, incluso tuve que autorizar la cirugía por que había riesgo de morir durante la intervención.
¿Qué pensó cuando le dijeron eso?
Me asuste mucho, aunque más que eso realmente sentí fue pesar por morirme y dejar a mi hijo menor sin estudio, el de 14 años.
¿Y cómo fue entonces el procedimiento?
Fue el segundo intento pero me dio un nuevo infarto en plena cirugía, me agarro el peor dolor que he sentido y una resequedad en la garganta terrible,.
Le confieso que en un momento pasó el dolor y sentí que me iba, el doctor le gritaba a las enfermeras, y yo podía oirlos,¡ayúdenme que se nos murió este señor! Es cierto que se siente una paz, pero de pronto el dolor volvió y supe que estaba vivo.
¿Qué pasó después?
Me llevaron a Cuidados Intensivos. La enfermera me echo una cucharada de sopa en la boca e inmediatamente me vino el dolor de nuevo al pecho, Otra vez pensé que me iba a morir y perdí el conocimiento.
Cuando desperté, como 30 horas después, mi esposa me contó que me había infartado nuevamente porque no habían podido terminar la cirugía,. pero que cuando perdí la conciencia, volvieron a intentar,
¿Usted sabe que le dio un infarto?
Ahora sí, obviamente, pero antes no tenía ni idea, Me explicaron que era una herencia familiar, pero que si me hubiera cuidado desde un principio hubiera podido evitarme toda esta experiencia terrible.
¿Cómo se hubiera podido cuidar?
Mejorando los hábitos alimenticios, haciendo ejercicio y visitando de vez en cuando al cardiólogo, algo que nunca había hecho.
¿Qué otros factores de riesgo tenía?
No soy hipertenso ni tengo el colesterol alto, fume pero lo deje hace 24 años. Pienso que la falla fue mi ignorancia y que no había ejercicio.
¿Cómo cambió su vida esta experiencia?
Muchísimo, y mire que nos ha servido a todos para vivir más en familia. Claro, ahora tenemos mucho cuidado en no comer muy salado, incluso ya no le hecho azucar a nada y nos cuidamos de las grasas.
Estoy contento porque he notado el cambio, ya no me fatigo ni me molesta el pecho. Y sigo las indicaciones del médico, hago ejercicio controlado tres veces a la semana acá en la Liga Contra el Infarto y la Hipertensión, y estoy tomando medicina, por lo menos durante un año me dijeron los médicos.
¿Qué consejo le daría usted a otras personas?
hay que cuidarse y quererse más, valorar su propio organismo. Y sobre todo, consultar con los cardiólogos al menos una vez al año. Si bien ellos salvan vidas, depende de uno también en no llegar al punto de tener que depender de un cardiólogo para sobrevivir.