Conozca los tipos de grasas y cuáles preferir
- Están presentes en el aceite de oliva, en los pescados, en la comida chatarra, etc.
Las grasas juegan un papel importante en nuestra alimentación y son necesarias para que nuestro organismo funcione correctamente, se necesitan para la formación de células, de las hormonas, para aumentar nuestras defensas y para el desarrollo de la mayoría de los órganos como el cerebro, el corazón, etc.
Sin embargo, hay que consumirlas de la manera correcta. Se dividen en cinco grupos:
- Grasas monoinsaturadas (aceite de oliva)
- Poliinsaturadas omega 6 (aceite de girasol)
- Poliinsaturadas omega 3 (pescado)
- Saturadas (carne de res)
- Grasas trans (aceite industrial)
Las tres primeras grasas (insaturadas) se consideran saludables, mientras las dos últimas son poco saludables.
- Monoinsaturadas (aceite de oliva)
Es óptima tanto para acompañar las ensaladas como para cocinar, reduce el colesterol malo (LDL) y eleva el bueno (HDL), aporta vitaminas E y otros antioxidantes. También se encuentran en los frutos secos como ( las almendras, nueces, avellanas), algunos pescados como el bacalao, los aguacates, el pollo y el pato. Todos son aconsejables, pero tienen un alto contenido de calorías.
- Poliinsaturadas omega 6 (aceite de girasol)
No se aconseja consumir alimentos freídos pues se degradan y se vuelven poco saludables. Otros aceites ricos en omega 6 son el de maíz y el de soja que resultan ser beneficiosos para los diabéticos, pues mejora la eficacia de la insulina y también está presente en los frutos secos.
- Poliinsaturados omega 3 (pescado azul)
Muchos estudios lo comprueban, son un auténtico regalo para la salud cardiovascular. Puede reducir el riesgo de muerte súbita hasta en un 45 por ciento en pacientes con enfermedad cardiovascular en consumo diario, además son antiinflamatorios y aumentan las defensas del organismo, bajan los triglicéridos y tienen una acción antiplaquetaria que evita la formación de coágulos. Son el salmón, el atún, las anchoas, las sardinas o cualquier otra especie de pescado azul.
- Saturadas (carnes rojas)
Estas son para consumir menos, son las responsables de aumentar el colesterol malo (LDL), es decir el riesgo de infarto, de cáncer colorrectal, cáncer de mama, gástrico o de esófago.
También está presente en los embutidos y productos lácteos, (leche, queso, etc), en casi todos los alimentos de origen animal con excepción del pescado.
- Grasas trans (industrial)
Son venenos y las que más abundan. En la etiqueta dice “grasas vegetales hidrogenadas”, no tiene ninguna virtud para la salud.
Están en las galletas, bizcochos, pasteles, frituras, comidas rápidas, postres, en platos precocidos, en casi todos los productos modernos porque son más rentables para la industria.
Al cocinar, las temperaturas altas alteran las grasas especialmente las poliinsaturadas para volverse poco saludables, quizás el único que conserva sus cualidades es el de oliva.
Lo mejor es no freír los alimentos, cocinarlos a la plancha, hervidos, al vapor o al horno, lo más saludable es al vapor porque los alimentos pierden pocas propiedades.
Las grasas más saludables las encuentra en:
- Aguacate
Esta fruta tiene altos contenidos en grasas monoinsaturadas, lo que ayuda a aumentar el colesterol bueno y reducir el malo y los triglicéridos.
- Atún y Salmón
Rico en Omega 3, las grasas poliinsaturadas que se encuentran en el salmón previenen la formación de coágulos de sangre que provocan infartos; incrementa la fluidez de la sangre, al mejorar la elasticidad de las paredes arteriales.
- Semillas de chía
Son ricas en omega-3, buena fuente de fibra, proteína, calcio, fósforos y zinc. Se asocian con reducir el apetito, el colesterol y mejorar la salud intestinal. Agrégalas a tus avenas, batidos o tostadas de aguacate.
- Almendras
Al igual que otros frutos secos, las almendras son ricas en grasas monoinsaturadas. Ayudan a reducir el colesterol total y LDL y tener efectos antioxidantes. Sin embargo, hay que aclarar que son altas en calorías, así que su consumo moderado es un puñado al día.
- Aceite de oliva
Es rico en grasas monoinsaturadas y bajo en grasas saturadas. Los beneficios para la salud del aceite de oliva se le atribuyen a sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. Se considera que las personas que consumen mayor cantidad de aceite de oliva tienen menos riesgos de padecer enfermedades cardiovasculares, algunos tipos de cáncer y demencia.