Noticia

¿Qué es el colesterol?

El colesterol es una sustancia cerosa que se encuentra en la sangre y en todas las células del cuerpo humano. Es vital para la formación de membranas celulares, ciertas hormonas y vitamina D. Sin embargo, niveles elevados de colesterol en la sangre pueden aumentar el riesgo de enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares.

El colesterol se transporta a través del torrente sanguíneo en lipoproteínas, que son partículas que contienen tanto lípidos (grasas) como proteínas.

¿Dónde se produce?

Una parte importante del colesterol de nuestro organismo se produce en el hígado. El resto es aportado a través de la dieta  y del colesterol presente en la bilis, parte del cual se vuelve a absorber en el intestino.

¿Por qué es bueno o malo?

Las dos principales lipoproteínas que transportan el colesterol son las lipoproteínas de baja densidad (LDL) y las lipoproteínas de alta densidad (HDL).

El LDL a menudo se llama “colesterol malo”, ya que puede acumularse en las paredes de las arterias, formando placas que pueden obstruir el flujo sanguíneo. Por otro lado, el HDL se considera “colesterol bueno”, ya que ayuda a eliminar el exceso de colesterol de la sangre, llevándolo de vuelta al hígado para su eliminación.

Son varias las causas que pueden elevar los niveles de colesterol. Algunas de ellas no se pueden modificar, pero la mayoría sí pueden cambiarse.

¿Cuáles son las cifras adecuadas?

  1. Colesterol total

o    Deseable: Menos de 200 mg/dL

o    Limitador: 200-239 mg/dL

o    Alto: 240 mg/dL o más

  1. Colesterol LDL (malo)

o    Óptimo: Menos de 100 mg/dL

o    Cerca del óptimo: 100-129 mg/dL

o    Limítrofe alto: 130-159 mg/dL

o    Alto: 160-189 mg/dL

o    Muy alto: 190 mg/dL o más

  1. Colesterol HDL (bueno)

o    Riesgo bajo: Más de 60 mg/dL

o    Riesgo intermedio: 40-60 mg/dL

o    Riesgo alto: Menos de 40 mg/dL

  1. Triglicéridos:

o    Deseable: Menos de 150 mg/dL

o    Limitador: 150-199 mg/dL

o    Alto: 200-499 mg/dL

o    Muy alto: 500 mg/dL o más

Estas cifras son solo pautas generales y pueden variar según la edad, el sexo, la salud general y otros factores de riesgo individuales.

Principales causas

 Las causas del colesterol alto pueden ser diversas y estar relacionadas con factores genéticos, estilo de vida y condiciones médicas.

 

  1. Dieta alta en grasas saturadas y colesterol:Consumir regularmente alimentos ricos en grasas saturadas y colesterol, como carnes grasas, productos lácteos enteros, alimentos fritos y alimentos procesados, puede elevar los niveles de colesterol en la sangre.
  1. Obesidad y sobrepeso:El exceso de peso corporal, especialmente cuando se acumula alrededor de la cintura, puede aumentar los niveles de colesterol ‘malo’ y disminuir los niveles de colesterol ‘bueno’.

 

  1. Inactividad física:La falta de ejercicio regular puede contribuir al aumento del colesterol LDL y disminuir el colesterol HDL.
  1. Fumar:daña las paredes de los vasos sanguíneos, lo que puede llevar a la acumulación de colesterol y aumentar el riesgo de enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares.

5.Factores genéticos: Algunas personas tienen una predisposición genética a tener niveles elevados de colesterol. Esto puede deberse a trastornos genéticos como el hipercolesterolemia familiar, que causa niveles extremadamente altos de colesterol LDL desde una edad temprana.

  1. Edad y género:A medida que envejecemos, es más probable que nuestros niveles de colesterol aumenten. Las mujeres suelen tener niveles de colesterol más bajos antes de la menopausia, pero después de la menopausia, sus niveles de colesterol LDL tienden a aumentar.
  1. Condiciones médicas:Algunas condiciones médicas, como la diabetes tipo 2, el síndrome metabólico, el hipotiroidismo, enfermedades del hígado y del riñón, pueden estar asociadas con niveles elevados de colesterol.
  1. Medicamentos:Algunos medicamentos pueden aumentar los niveles de colesterol en la sangre.

¿Qué son los triglicéridos?

Los triglicéridos son un tipo de grasa (lípidos) que se encuentra en la sangre y en los tejidos corporales. Son una forma de almacenamiento de energía en el cuerpo y se forman a partir de la combinación de ácidos grasos y glicerol.

Cuando consumimos alimentos, el cuerpo convierte cualquier exceso de calorías que no necesita inmediatamente en triglicéridos, que se almacenan en las células de grasa.

Los triglicéridos se liberan en el torrente sanguíneo cuando el cuerpo necesita energía entre comidas. Sin embargo, si consumimos más calorías de las que quemamos regularmente, los niveles de triglicéridos pueden aumentar y también el riesgo de desarrollar enfermedades cardíacas.

Los niveles normales de triglicéridos en la sangre están por debajo de 150 miligramos por decilitro (mg/dL). Valores entre 150 y 199 mg/dL se consideran limítrofes, mientras que niveles de 200 mg/dL o más se consideran elevados.

Los niveles elevados de triglicéridos (hipertrigliceridemia) pueden ser causados por varios factores, incluyendo:

  1. Dieta alta en carbohidratos y azúcares:Consumir alimentos y bebidas ricos en carbohidratos refinados y azúcares puede elevar los niveles de triglicéridos.
  1. Obesidad y sobrepeso:El exceso de peso corporal, especialmente alrededor de la cintura, está asociado con niveles elevados de triglicéridos.

 

  1. Inactividad física:La falta de ejercicio regular puede contribuir al aumento de los niveles de triglicéridos.
  1. Consumo excesivo de alcohol:El consumo excesivo de alcohol puede elevar los niveles de triglicéridos.
  1. Factores genéticos:Algunas personas pueden tener una predisposición genética a tener niveles elevados de triglicéridos.
  1. Condiciones médicas:La diabetes tipo 2, el síndrome metabólico, el hipotiroidismo, enfermedades del hígado y del riñón pueden aumentar los niveles de triglicéridos.
  1. Medicamentos:Algunos pueden aumentar los niveles de triglicéridos.

El control de los niveles de triglicéridos es importante para mantener la salud cardiovascular. Esto puede lograrse mediante cambios en el estilo de vida, como llevar una dieta saludable, hacer ejercicio regularmente, mantener un peso saludable, evitar fumar y limitar el consumo de alcohol.